Nicaragua: Chávez defiende sus petronegocios con Ortega – por
Octavio Enriquez & Arlen Cerda
Después
de posar para la foto en que los políticos besan a niños, se bañan
de multitudes y de prometer incluso baby
shower a las madres que bautizarán a sus hijos como Hugo
Daniel, bajo el apremiante sol de Managua, el presidente venezolano
Hugo Chávez Frías defendió los negocios que se han tejido al amparo
de la millonaria ayuda venezolana que envía al país.
Chávez llegó ayer al país a la 1:00 p.m., a bordo del avión
presidencial, un Airbus A319CJ, con una amplia comitiva que incluía
a su hija Rosa. Chávez fue recibido por Daniel Ortega Saavedra y su
esposa Rosario Murillo. También la jefa de la Policía Nacional,
Aminta Granera, y el jefe del Ejército, el general Julio César
Avilés.
Acto seguido, recorrió varios sitios de Managua en compañía de la
familia presidencial, donde prometió casas y otras regalías. Sus
secretarios tomaban nota de los nombres de las personas a los que
les prometía bienestar como han hecho siempre los viejos caudillos
en Nicaragua.
Tampoco pudo evitar acompañar a una banda musical de muchachos que
bailaban felices, mientras los mandatarios tocaban cada uno su
güirro (cilindro metálico).
Varios esfuerzos se hicieron para hablar con Chávez, cobijado por la
seguridad de Ortega y la propia traída de Venezuela, que incomodó,
incluso, a los medios oficialistas.
Ante cada oportunidad en los micrófonos de los medios, Chávez
insistía en su alegría por estar en Nicaragua. “Amor con amor se
paga. Estamos aquí para seguir cooperando”, decía.
Pero ante los medios independientes, cuando llegó la hora de las
preguntas críticas, Chávez no se dio por enterado de los negocios de
Alba de Nicaragua S.A (Albanisa).
NEGOCIO MILLONARIO
Albanisa es la sociedad de capital venezolano-nicaragüense a través
de la cual fluyen los petrodólares y su vida ha sido tan próspera
que ahora controla el mercado de hidrocarburos y se lucra con el
negocio de la generación de energía en el país.
Según documentación interna de Albanisa, a la que LA PRENSA ha
tenido acceso, sólo en el rubro de la generación el consorcio de
Albanisa está sumando seis millones de dólares mensuales por
venderle a Gas Natural, con la que tiene un contrato que durará 15
años.
Albanisa controla el 85 por ciento de la importación de
hidrocarburos en el país, el negocio de la generación de energía y
participa en la red de gasolineras de la Distribuidora Nacional de
Petróleo (DNP), rentado antes por el consorcio Glencore.
HOTEL DE LUJO Y TV
La prosperidad ha hecho que el consorcio ligado a la familia
presidencial y sus empresas hijas, principalmente Alba Alimentos de
Nicaragua S.A. (Albalinisa), adquieran hoteles de lujo, fincas con
ganado de alta calidad genética y una serie de compras demostradas
en investigaciones de LA PRENSA el año pasado.
A finales de 2009 trascendió también que habían adquirido Canal 8,
valorado en diez millones de dólares.
“Publicado sale cualquier cosa“, dijo Chávez en referencia al
negocio energético. “Nosotros estamos aquí para cooperar con el
pueblo y gobierno de Nicaragua, estamos creando un sistema
socialista de interacción, allá los que digan lo que digan”, expresó.
Chávez ofreció estas declaraciones mientras los periodistas
caminaban un par de minutos siguiendo el vehículo Mercedes Benz, con
Ortega al volante en los alrededores del Gancho de Caminos en el
populoso Mercado Oriental.
Eso sí, el venezolano dejó claro que el acuerdo de la cooperación es
“de Estado a Estado”, pero no explica entonces por qué no
transparentan la ayuda ni la incluyen en los presupuestos de ambos
países, una práctica que el ex directivo de Petróleos de Venezuela,
Gustavo Coronel, valoró como usual entre Caracas y los países socios
del Alba.
Se critica mucho la cooperación venezolana porque se dice que se
privatizó a través de compras de hoteles de lujo, pregunta una
periodista.
No sé quién hará la crítica, ésta es una cooperación de gobierno a
gobierno, de Estado a Estado, ésta es una cooperación entre
gobiernos socialistas.
También se dice que es un negocio redondo con el tema de la energía,
controlan la importación, generan energía y se la venden a Gas
Natural…, preguntamos
¿Quién dice eso?, interrumpe Chávez.
Ha salido publicado y en escrituras públicas dice…
(Vuelve a interrumpir) ¡Publicado sale cualquier cosa! Nosotros
estamos aquí para cooperar con el pueblo y Gobierno de Nicaragua.
Estamos creando un sistema socialista de interacción, allá los que
digan lo que digan.
(Los simpatizantes gritan: ¡Chávez, Chávez!)
El recorrido sale raudo y nuevamente habrá oportunidad de preguntar
en los alrededores de las casas para el pueblo, cuyos fondos fueron
aportados por el Seguro Social en un caso de corrupción que
involucró al albacea de Ortega, un conocido de Chávez por supuesto,
el ingeniero Francisco López Centeno, vicepresidente de Albanisa.
MENSAJE A EX DGSE
En el sector de las casas para el pueblo, cercano al Puerto Salvador
Allende, se presentó, junto a la camioneta de Ortega, un antiguo
miembro de la Seguridad del Estado.
Camiseta roja. Gorra. Se cuadra. Chávez le pregunta sobre su
trayectoria. Luego viene el consejo: “Ustedes tienen que luchar muy
duro. La fuerza que despertó ya es muy grande. Ahora hay que
organizarla. La derecha gobierna con mentiras”, clama el mandatario.
Luego nuevamente aparecen los periodistas.
Presidente Chávez, hace unos meses un ex directivo de PDVSA Gustavo
Coronel lo acusó a usted de traidor a la patria, ¿qué piensa eso?
(Fija inmediatamente la mirada) ¿Quién? (el rostro lo tiene
enrojecido, probablemente está fatigado por la asoleada desde que
inició el recorrido, en el que lleva cuatro horas desde su salida
del aeropuerto y su paso por el Mercado Oriental).
El ex directivo de PDVSA.
¿Quién es ése?
Tres personas alrededor intervienen.
— ¿Qué pregunta es ésa?, ¿ya oíste lo que le pregunta? La Policía no
ve, debería de quitar a ése que está insultando al Presidente, dice
una mujer. Un coro escaso de personas lo pide.
Chávez reacciona: ¿Tú no tienes chico alguna pregunta interesante
que hacerme?
La caravana sigue y llega al Puerto Salvador Allende. El primero de
los vehículos es una camioneta blanca de lujo, conducida por Edgardo
Cuarezma, secretario político del Frente Sandinista en Managua. A la
par va Fidel Moreno Briones, secretario de la comuna capitalina.
En el puerto los presidentes se suben en el barco. A La
novia del Xolotlán también suben varios de las comitivas
de ambos.
Los mandatarios ofrecen declaraciones a los medios oficialistas.
Hablan de softbol y béisbol en La Nueva Radio Ya, gerenciada por la
familia presidencial. Son 20 minutos de declaraciones para
prometerse un juego de softbol la próxima vez que el venezolano
venga al país. Éste es el quinto viaje que hace a Nicaragua. Muchas
risas entre los más cercanos.
EL GALLO ENNAVAJADO
El paseo que los mandatarios darían en el barco no se pudo. Todos
bajan y de nuevo en el Mercedes Benz conducido por Ortega, éstos y
su caravana de más de treinta vehículos siguen, al fin rumbo a la
residencia de Ortega, que funciona como Secretaría del partido de
Gobierno y despacho presidencial, en el reparto El Carmen.
Para entonces son casi las 6:00 p.m.
Pasando por la casa del comandante Edén Pastora, la música sube y el
Ortega de los años ochenta revive. Ya no es el señor de la
solidaridad que anuncian sus rótulos, ha vuelto a ser el “gallo
ennavajado”, como recuerda la música que le dedican en esa cuadra,
que como otras esquinas de la capital concentró a simpatizantes del
Frente Sandinista y a varios empleados públicos en los sectores del
Ministerio de Gobernación y la Cancillería.
AGENDA DESCONOCIDA
Los motivos de esta quinta visita de Chávez aún son desconocidos.
Tras la bienvenida en el aeropuerto y el recorrido por la capital
estaba previsto que los presidentes ofrecerían una conferencia de
prensa para precisar y firmar varios acuerdos de cooperación. Pero
ni siquiera Chávez pudo detallar de qué sería eso. “Son más de
cincuenta proyectos de cooperación”, fue lo único que respondió
luego de la insistencia de los periodistas.
A pocas cuadras del destino de los presidentes hay un perímetro de
seguridad y sólo pasan los vehículos oficiales.
Luego, la actividad terminó.
Fuente:
La Prensa (Nicaragua) |