Che Guevara:
Por La Boca Muere El Pez
Humberto (Bert) Corzo*
Introducción
El refrán "Por la boca muere el pez", se refiere a aquellos que
hablan más de lo necesario hasta quedar embaucados por su propio
discurso. ¿Puede su mítica reputación sobrevivir la publicación de
sus propias palabras?
El objetivo de este artículo es exponer la verdad sobre el Che,
desmitificarlo ante aquellos que sienten admiración por este asesino
en masa, exponiendo los hechos basados en sus escritos, diarios,
discursos, cartas, conversaciones y comentarios de aquellos que lo
conocieron.
El Che jamás cuestiono los crímenes de Stalin y Mao, ni las
concepciones totalitarias del Marxismo-Leninismo, incompatibles con
los ideales de libertad y democracia, defendiendo hasta su muerte
sus ideas estalinistas. Su fanatismo lo hizo un implacable enemigo
de la libertad. El escritor francés Regis Debray, autor de
“Revolución en la revolución”, escribió sobre el Che que: “Él era
adepto del totalitarismo hasta el último pelo del cuerpo.”
Los primeros años
Alberto Benegas Lynch en su libro “MI PRIMO EL CHE” escribe: “En una
oportunidad, una de mis tías me contó que de muy chico el Che se
deleitaba con provocar sufrimientos a animales y, de mas grande,
insistía en que la muerte (de otros) no era tan mala después de todo
y que, en este contexto, se adelantó a la definición de Woody Allen:
“morir es lo mismo que dormirse pero sin levantarse para hacer pis”.
Ya desde chico se hace transparente su sadismo.
Carlos "Calica" Ferrer, uno de sus primeros amigos, facilito la
primera relación sexual del Che con la sirvienta de la familia
Ferrer. Se hizo habitual para el Che mantener relaciones sexuales
con las sirvientas que trabajaban en las casas de sus familiares y
amigos.
Carlos Figueroa, amigo de Guevara en tiempos juveniles en Alta
Gracia, dice lo siguiente del Che: “Yo le puse El Gallo Rápido
porque estaba comiendo en el comedor; y de momento al entrar la
mucama (sirvienta) la obligaba a subirse sobre la mesa para hacerle
el sexo desesperadamente. Después se deshacía de la infeliz, y
continuaba comiendo como si nada hubiera ocurrido…”. Utilizo a las
mujeres de inferior nivel social como objetos sexuales.
El Che no mostró interés en la política argentina durante sus años
de estudiante, al contrario de sus amigos estudiantes que les
gustaba argüir sobre política y participar de alguna forma. Esta
actitud contrasta con la de sus padres y su íntimo amigo Alberto
Granado que se oponían al peronismo. Él lo reconoce en una carta que
escribió veinte años después: “No tuve preocupaciones sociales en mi
adolescencia, ni participé en las luchas políticas o estudiantiles
de Argentina.” [1] No existen otros comentarios, ni cartas, ni otra
evidencia que hagan referencia a su opinión sobre el acontecimiento
político más importante de la Argentina de esa época.
Durante el periodo que el Che estudiaba en la Universidad de Buenos
Aires, su opinión con respecto a los militantes políticos de
izquierda, nos llega a través de su novia María del Carmen Ferreyra
"Chichina", la cual relata que el Che tenia una postura crítica con
respecto a los militantes de izquierda, a los que acusaba de
“sectarios y faltos de flexibilidad.”
Primer viaje por América Latina
En “Notas de Viaje”, su diario de viaje a través de América Latina
en 1952, relata que al llegar a Chile él y Granado se hacen pasar
por médicos especialistas en leprología, logrando una entrevista con
un diario local donde los reconocen como tales, lo cual los hace
populares entre la población, valiéndose de dicho engaño para lograr
techo y comida gratis. En este caso como en otros relatados por él,
su falta de honestidad, cuando se encontraba en dificultades, lo
condujo a estafar a aquellos que se cruzaba en su camino. Su falta
de ética moral ya se hace evidente.
Esperando un barco que los conduzca a la Isla de Pascuas el Che
escribió:”Isla de Pascuas… allí tener un novio blanco es un honor
para ellas. Allí, trabajar, qué esperanza, las mujeres lo hacen todo,
uno come, duerme y las tiene contentas… Qué importa quedarse un año
allí, qué importan estudios, sueldos, familia, etc.” [2] Este
comentario da fe de su machismo, de su actitud discriminatoria
contra las mujeres.
El racismo de Che se hace evidente en estos comentarios en su diario
de viaje : “Los negros, esos magníficos ejemplares de la raza
africana que han mantenido su pureza racial gracias al poco apego
que le tienen al baño, han visto invadidos sus reales por un nuevo
ejemplar de esclavo: el portugués. El desprecio y la pobreza los une
en la lucha cotidiana, pero el diferente modo de encarar la vida los
separa completamente; el negro indolente y soñador, se gasta sus
pesitos en cualquier frivolidad o en 'pegar unos palos' (emborracharse),
el europeo tiene una tradición de trabajo y de ahorro que lo
persigue hasta este rincón de América y lo impulsa a progresar, aún
independientemente de sus propias aspiraciones individuales.” [2] En
la película “Diarios de Motocicletas” omitieron esta observación
incómoda del diario del Che.
Es irónica su observación a cerca de los negros con respecto al baño,
ya que su higiene personal dejaba mucho que desear. De joven mereció
el calificativo de "el chancho" (el cerdo), pues se bañaba de Pascua
a San Juan.
Enrique Ros en su artículo “Ernesto Guevara: Su cuestionable título
de Médico”, escribe lo siguiente: “En diciembre, en menos de 22 días
lectivos, aprueba once materias. Quince, casi la mitad de los cursos
necesarios para adquirir el doctorado, examinados y aprobados en
apenas tres meses, sin haber asistido a clases ni a prácticas en
todo el año con la probable excepción de las últimas semanas….Ernesto
Guevara de la Serna tendría que haber asistido 25 horas diarias!!!
en cada uno de los 66 días lectivos de octubre, noviembre y
diciembre de 1952 para haber cumplido con los requisitos académicos
del plan de estudios de 1937 vigente en 1948 cuando se matriculó en
la Escuela de Medicina de la Universidad de Buenos Aires…. Ante
estas nuevas contradicciones solicité copia del expediente académico
de Ernesto Guevara….Se me comunico que la Facultad de Medicina no
podía ofrecerme copia porque el expediente académico de Ernesto
Guevara de la Serna había sido robado.” Siendo el Che un fotógrafo
aficionado es inconcebible que no existan fotos de la graduación, ni
testimonios de médicos graduados con él o alguna otra prueba de su
graduación. Luce que su graduación de médico es un mito más sobre su
persona.
En agosto de 1953 desde El Cuzco escribió a su madre que en los ocho
días que estuvieron allí, “El Chancho se baño solo una vez y de
mutuo acuerdo, solamente por razones de salud” [1]. Guevara en su
diario boliviano en septiembre 10, 1967, escribe: “Se me olvidaba
recalcar un hecho; hoy, después de algo más de seis meses, me bañé.
Constituye un récord que ya varios están alcanzando.” Sus compañeros
cubanos, debido a su falta de aseo personal, le pusieron el apodo de
“bola de churre”.
En “Notas de Viaje” hizo la siguiente observación que llamó “Notas
en el Margen”: “…y sé, porque lo veo impreso en la noche, que yo, el
ecléctico disector de doctrinas y psicoanalista de dogmas, aullando
como poseído, asaltaré las barricadas o trincheras, teñiré en sangre
mi arma y, loco de furia, degollaré a cuanto vencido caiga entre mis
manos…Ya siento mis narices dilatadas, saboreando el acre olor de
pólvora y de sangre, de muerte enemiga; ya crispo mi cuerpo, listo a
la pelea, y preparo mi ser como a un sagrado recinto para que él
resucite con vibraciones nuevas y nuevas esperanzas el aullido
bestial del proletariado triunfante.” [1] Este joven, egocéntrico y
presumido, en este comentario manifiesta su violencia retórica e
ideológica. Esta observación también fue omitida de la película
“Diario de Motocicleta”
Segundo viaje por América Latina
En sus notas del segundo viaje titulado “Otra Vez”, en julio de 1953
en Bolivia, relata lo siguiente: “Cuando portando todo nuestro
equipaje íbamos a subir a segunda, nos atajó un empleado de
investigaciones que tras algunos cabildeos nos propuso subir a
primera y llegar gratis al Cuzco con las medallas de dos de ellos,
lo que, por supuesto, aceptamos. Así viajamos cómodamente dándoles a
los tipos el importe del pasaje de segunda.” [3] Aquí queda muy bien
reflejada su debilidad moral, su falta de austeridad.
Al llegar a Costa Rica, anota lo siguiente: “Yo me quede afuera con
una negrita que me había levantado, Socorro, más puta que las
gallinas, con 16 años a cuesta.” [3] Guevara deja claro su desprecio
hacia la mujer y su latente resentimiento social se hace evidente
una vez más.
El 10 de diciembre de 1953, le escribió a su tía desde San José,
Costa Rica, “En El Paso tuve la oportunidad de pasar por los
dominios de la United Fruit, convenciéndome una vez más de lo
terrible que son esos pulpos capitalistas. He jurado delante de un
estampa del viejo y llorado camarada Stalin que no descansaré hasta
que vea aniquilados a esos pulpos capitalistas.” Otra carta enviada
a la misma tía la firmo como "Stalin II."
Aun más importante fue el hecho de que cuando Guevara visitó la URSS
en su capacidad como uno de los líderes de la revolución cubana en
noviembre de 1960, insistió en depositar un tributo floral en la
tumba de Stalin, haciendo caso omiso de la recomendación del
embajador cubano Faure Chomón (uno de los sobrevivientes del
Directorio Revolucionario que atacaron el Palacio Presidencial). Es
importante tener en cuenta que esto ocurrió más de cuatro años
después de las revelaciones de Khrushchev sobre los crímenes de
Stalin.
Che Guevara durante la mayor parte de su vida no tuvo empleo estable,
y dependió de su madre, su hermana Celia y su tía Beatriz, que
solían enviarle dinero, y de otras mujeres en su vida, para que lo
ayudaran a obtener empleo y también en el pago de sus deudas. Jon
Lee Anderson en su biografía del Che relata los siguientes casos:
“Para ayudarle en su búsqueda de obtener un puesto de médico, la
bien conectada Hilda Gadea le presentó a algunos de sus contactos
gubernamentales de alto nivel... La contendiente principal por las
atenciones de Ernesto durante febrero y marzo de 1954 fue una
enfermera llamada Julia Mejía. Ella había preparado una casa en el
lago Amatitlan en donde Ernesto podría ir a pasar el fin de semana.
Al poco tiempo, comenzaron a tener una relación casual... En marzo,
la situación de Ernesto cambió muy poco. Hilda pagó parte de su
cuenta de la pensión, Julia Mejia le consiguió una entrevista de
trabajo en la selva oriental de Petén... Con algunas joyas que Hilda
le dio con dicho fin, él pagó parte de su cuenta de la pensión... En seguida encontró trabajo de noche descargando toneles de alquitrán
en una cuadrilla de construcción de carreteras. Trabajó una segunda
noche solamente... Fue la primera tarea sostenida de trabajo físico
que jamás hiciera.”
En julio Che escribió en su diario en referencia a Hilda: “Lo que sí
la afectó es que le confesé la cogida con la enfermera.” [3] En
agosto un amigo de Gualo Garcia llega a Guatemala en uno de los
aviones que venían a recoger a los exilados argentinos, trayendo 150
dólares enviados por la familia del Che y se los entregó. Che
escribe en su diario que también le enviaron, “dos trajes, 4 kilos
de yerba y un montaña de pequeñas cosas estúpidas.” [3]
Che se va con Hilda a San Juan Sacatepéquez en un viaje de despedida,
y describe lo siguiente en su diario: “hoy, lo dedique a despedirme
de Guatemala con un paseíto a San Juan Sacatepéquez con profusión de
franelas (caricias) y algún polvito superficial.” [3]
“Mil novecientos cincuenta y cinco comenzó con pocos cambios para
Ernesto. Por el momento, su realidad seguía siendo la de un joven
vagabundo argentino”... “el hecho de que Ernesto ahora necesitó a
Hilda de nuevo para el préstamo ocasional” y, como él había escrito
en su diario, para satisfacer la ‘urgente necesidad de una mujer que
coja’.” [1]
En esta vida de vagabundo que adoptó por su propia elección, se nos
muestra como un ser cruel, duro, irresponsable y aprovechador de las
mujeres que lo ayudaron en este periodo de su vida, a las que
consideraba de carácter débil, y que le permitió “vivir del cuento.”
Aquellos que intentan presentar al Che como un filántropo de firmes
valores cristianos, la respuesta se las da él en este fragmento de
la carta que le escribió a su madre el 15 de julio de 1956 desde una
prisión mejicana: “No soy Cristo y filántropo, vieja, soy todo lo
contrario de un Cristo, y la filantropía me parece cosa de... (palabra
ilegible), por las cosas que creo, lucho con toda las armas a mi
alcance y trato de dejar tendido al otro, en vez de dejarme clavar
en una cruz o en cualquier otro lugar.”
En carta a Tita Infante, en octubre de 1956, le comenta: “Por
supuesto, todos los trabajos científicos se fueron al cuerno y ahora
soy sólo un asiduo lector de Carlitos y Federiquito (en referencia a
Karl Marx y Frederick Engel) y otros itos….Por otro lado te diré que
tengo una cantidad de chiquilines de sexto año encandilados con mis
aventuras e interesados en aprender algo sobre las doctrinas de San
Carlos (eufemismo por Karl Marx)... El tiempo libre lo dedico al
estudio en forma informal de San Carlos.” En ésta y otras cartas se
hace evidente la formación marxista del Che, y en este caso también
el uso de la doctrina marxista en el “lavado de cerebro” de los
niños con propósitos políticos.
Pedro Corzo en el documental “Anatomía de un mito”, refiere sus
conversaciones con Miguel Sánchez, el "Coreano", responsable de
instruir militarmente a los revolucionarios de la fuerza
expedicionaria del Granma en México en 1956. El Coreano afirmó que
“el Che tenía siempre problemas con los negros y los despreciaba al
igual que a los indios de México”, a los que se refirió como “la
indiada analfabeta de México”. La cara racista del Che se muestra de
nuevo.
Sediento de sangre en la Sierra Maestra
“Finalmente se prepararon para el ataque, y dejaron a “Chicho”
Osorio al cuidado de dos hombres ‘con encargo de matarlo apenas
iniciado el tiroteo, cosa que cumplieron estrictamente’, según
escribió fríamente el Che.” [1]. La ejecución se llevo a cabo en la
madrugada del 17 de enero de 1957 cuando comenzó el tiroteo.
Hilda Gadea, primera esposa del Che, publica en su libro “Ernesto:
Memorias del Che Guevara en Sierra Maestra”, la carta que él le
enviara con fecha de enero 28 de 1957, en la cual se puede apreciar
su disposición violenta y sádica en esta frase: "Querida vieja: Aquí,
en la selva cubana, vivo y sediento de sangre, escribo estas
ardientes líneas inspiradas en Martí."
El 18 de febrero de 1957 el guía campesino Eutimio Guerra, acusado
de pasar información al enemigo, es enjuiciado por los rebeldes y
condenado a muerte. A la hora de la ejecución, sus compañeros no se
deciden a pasarlo por las armas, y es cuando Che se adelanta, extrae
su pistola matando de un disparo en la sien a Eutimio, describiendo
el acto en su diario de la Sierra Maestra: “…acabé el problema
dándole en la sien derecha un tiro de pistola [calibre] 32, con
orificio de salida en el temporal derecho. Boqueó un rato y quedó
muerto. Al proceder a requisarle las pertenencias no podía sacarle
el reloj amarrado con una cadena al cinturón, entonces él me dijo
con una voz sin temblar muy lejos del miedo: ‘Arráncala, chico,
total…. Eso hice y sus pertenencias pasaron a mi poder.” [1]
Posteriormente Che escribirá en su Diario: “…ejecutar a un ser
humano es algo feo, pero ejemplarizante. De ahora en adelante aquí
nadie me volverá a decir el saca muelas de la guerrilla.” En una
carta a su padre refiriéndose a dicha ejecución escribe: “Tengo que
confesarte, papá, que en ese momento descubrí que realmente me gusta
matar.”
Marcos Bravo, dirigente del movimiento clandestino del 26 de Julio,
en su libro “La Otra Cara Del Che”, relata que un soldado del
gobierno de 17 años, capturado e interrogado por el Che, le
respondió: “No he matado a nadie, comandante. Acabo de llegar aquí!
Soy hijo único, mi madre es una viuda y me incorporé al ejército por
el salario, para enviárselo a ella todo los meses….No me mate!”. “No
me mate!--¿por qué? Respondió el Che. El joven soldado fue atado
delante de la fosa recientemente cavada y fusilado.
En abril el chivato Filiberto Mora fue engañado y apresado por los
rebeldes, y el Che escribió en su diario: “El hombre, Filiberto,
había sido engañado, pero al minuto que vio a Fidel se dio cuenta de
lo que estaba pasando y empezó a pedir disculpas.”...
“Se ajustició al chivato; a los diez minutos de darle el tiro en la
cabeza lo declaré muerto”
A fines de Mayo dos soldados en ropa de civiles, que estaban
espiando alrededor del aserradero del Uvero, fueron hechos
prisioneros. Se determinó fusilarlos antes del ataque a la
guarnición del ejército en el Uvero. Che escribió en su diario: “Se
cavó la fosa para los dos guardias chivatos y se dio la orden de
marcha. La retaguardia los ajustició”
En septiembre Enrique Acevedo, un joven de quince años que se había
incorporado a la columna del Che, escribió en su diario: “Al
amanecer traen a un hombre fornido vestido de verde, pelado a lo
militar, con grandes bigotes: es Cuervo, quien campea por sus
respetos en la zona de San Pablo de Yao y Vega de Yúa. Ha cometido
tropelías bajo las banderas del 26 de Julio… El Che lo recibe en una
hamaca. El prisionero intenta darle la mano, pero no encuentra
respuesta. Lo que se habla no llega hasta nosotros, pese a que se
discute fuerte, parece un juicio sumario. Al final lo manda a
retirarse con un gesto de desprecio de su mano. Lo llevan a una
cañada y lo ejecutan
Después de la ejecución, Che se trasladó hacia el área cerca del
monte Caracas, en una operación de limpieza de la banda armada
capitaneada por el Chino Chang que operaban en dicha zona. Luego de
apresar a Chang, comenzaron los juicios. Chang acusado de robar y un
campesino acusado de violador, fueron fusilados. Che escribió acerca
de la ejecución: “Primero fueron ajusticiados el campesino violador
y el Chino Chang, ambos serenos, fueron atados en los palos del
monte...”
A los pocos días Dionisio Oliva, acusado de robar ganado y
provisiones destinadas para los rebeldes, fue capturado junto con
otros, entre los cuales se encontraba Echevarría, hermano de uno de
sus compañeros del Granma. Oliva fue ejecutado y el Che también
ordenó la ejecución de Echevarría por crímenes no especificados y
anotó en su diario:
“Tenía que pagar el precio."
A finales de febrero de 1957, “el maestro”, hombre de gran fuerza
que fue escogido para acompañar al Che, que estaba sufriendo un
ataque de asma, hasta que el guajiro que fue a comprar la medicina
para el asma regresara con la misma. El diez de marzo el Che en
compañía del maestro llegó por fin a la finca de Díaz. Después de
Oliva, en octubre “el
maestro” también fue fusilado. Relata Franqui, “A este guajiro lo
fusilan por aparentar haber sido asaltante del Moncada y tripulante
del Granma y hacerse pasar por el Che en la zona rebelde, con el fin
de seducir muchachas: ¿Quieren cosa más grande? --dice Fidel--. Fue
directo, no se le hizo juicio. Lo fusilamos.” [4]
En el mes de octubre el Che ejecutó a Aristidio, un campesino que
durante su ausencia vendió el revolver que le había dado, y expresó
su deseo de abandonar la lucha cuando los rebeldes se trasladaran a
otro lugar. Su duda sobre la ejecución de Aristidio quedó reflejada
en su diario en este comentario: "sí, realmente era lo
suficientemente culpable como para merecer la muerte."
En otras ocasiones Che simulaba ejecuciones, vendando a los acusados
y disparando al aire, como método de tortura psicológica.
“La marcha del Che a través de la Sierra Maestra estaba sembrada de
cadáveres de chivatos, desertores y delincuentes, hombres cuyas
muertes había ordenado y en ocasiones ejecutado él mismo.” [1]
Che le escribió el 14 diciembre de 1957 una carta a René Ramos
Latour ("Daniel"), Coordinador Nacional del Movimiento 26 de Julio
que murió en combate con el grado de Comandante, lo siguiente:
“Pertenezco por mi formación ideológica a los que creen que la
solución de los problemas del mundo está detrás de la llamada
cortina de hierro y tomo este movimiento como uno de los tantos
provocados por el afán de la burguesía de liberarse de las cadenas
del imperialismo” [4]
Latour le respondió al Che el 18 de diciembre: “Quiero sólo dejar
constancia de nuestra opinión, que por supuesto es enteramente
distinta a la tuya... Nuestras diferencias fundamentales son que a
nosotros nos interesa llevar a los pueblos oprimidos de “nuestra
América” un gobierno que responda a su anhelo por la Libertad y el
Progreso, gobierno que ha de ser de unidades cohesivas que puedan
garantizar sus derechos como naciones libres y se hagan respetar por
las grandes potencias. En cambio, los que tienen tu preparación
ideológica piensan que la solución a nuestros males está en
liberarnos del nocivo dominio yanqui por medio del no menos nocivo
dominio soviético.” [3] En la misma carta, Ramos Latour escribía que
la ideología del Movimiento 26 de Julio se inspiraba en el
pensamiento político de José Martí, que consistía en hacer de Cuba
un país democrático y próspero, pero con justicia social, y que los
pactos con otras fuerzas opositoras eran necesarios y saludables.
El Dr. Armando M. Lago, fundador del Archivo Cuba, calculó un total
de 47 fusilamientos, la mayoría de ellos guajiros, llevados a cabo
por la guerrilla, y en 35 las bajas de la guerrilla en combate,
durante el año de 1957. Estas cifras son prueba contundente del
terror implantado por la guerrilla.
El 27 de junio de 1958 el Che escribió en su diario: “En la noche se
llevaron a cabo tres fugas y una de ellas doble; Rosabal, condenado
a muerte por chivato, Pedro Guerra, de la escuadra de Sorí, y dos
militares presos. Pedro Guerra fue capturado; se había robado un
revólver para la fuga. Fue ajusticiado inmediatamente.” [1]
Vargas Llosa escribe lo siguiente: “Les ordenó también a sus hombres
que asaltaran bancos, una decisión que justificó en una carta a
Enrique Oltuski, un subordinado, en noviembre de 1958: ‘Las masas
que luchan están de acuerdo con asaltar a los bancos porque ninguno
de ellos tiene un centavo en los mismos…’ El impulso de desposeer a
los demás de su propiedad y de reclamar la propiedad del territorio
de otros fue central a la política opresiva de Guevara.” [5]. Lo que
proponía era una vuelta al periodo del gansterimo político que tuvo
lugar al final de los años 40, con el cual Castro estuvo asociado
durante sus días de estudiante.
Jaime Costa Vázquez, ex comandante del ejército rebelde, dice que
gran parte de las ejecuciones atribuidas a Ramiro Valdés, quien más
tarde se convertiría en ministro del Interior de Cuba, fueron
responsabilidad directa de Guevara, debido a que Valdés era su
subordinado y seguía sus órdenes. "Ante la duda, mátalo" eran las
instrucciones del Che. Dice Costa que el Che ordenó la ejecución de
decenas de personas después de la toma de Santa Clara. Marcelo
Fernándes-Zayas en su artículo “La otra cara de la moneda”, dice,
“La toma de la ciudad de Santa Clara fue sangrienta para sus
oponentes… Muchos prisioneros fueron ejecutados sumariamente.
Puestos ante el paredón de fusilamientos, sin juicios ni
misericordia. Estas ejecuciones se llevaron a cabo frente a
fotógrafos, periodistas y cámaras de cine. Los prisioneros, en
muchos casos, eran jóvenes campesinos que se habían unido al
ejército como último recurso de desempleados y eran conocidos como ‘casquitos’.”
El Che en La Cabaña
Guevara fue nombrado por Castro jefe militar de la fortaleza de La
Cabaña en La Habana, después de que Batista huyera de Cuba, cargo
que ocupo desde enero hasta septiembre de 1959, y también
responsable de la Comisión Depuradora, con el fin de implantar el
terror revolucionario. En una comparecencia por el canal 6 de la TV
en febrero de 1959, el Che declaraba que “en La Cabaña todos los
fusilamientos se hacen por órdenes expresas mías.” Aquí él presidió
sobre centenares de ejecuciones en juicios sumarios que incluso un
biógrafo comprensivo como Jorge Castañeda, en su libro “Compañero:
Vida y Muerte del Che Guevara”, dice que “se llevaron a cabo sin el
respeto por el buen hacer de la justicia.”
Luis Ortega, en su libro ¡Yo soy el Che! relata lo que el Che le
dice a Duque Estrada: “Hay que trabajar de noche, el hombre ofrece
menos resistencia de noche que de día. En la calma nocturna la
resistencia moral se debilita. Haz los interrogatorios de noche. No
hace falta hacer muchas averiguaciones para fusilar a uno. Lo que
hay que saber es sí es necesario fusilarlo. Nada más. Debe dársele
siempre al reo la posibilidad de hacer sus descargos antes de
fusilarlo. Y esto quiere decir, entiéndeme bien, que debe siempre
fusilarse al reo, sin importar cuáles hayan sido sus descargos. No
hay que equivocarse en esto. Nuestra misión no consiste en dar
garantías procesales a nadie, sino en hacer la revolución, y debemos
empezar por las garantías procesales mismas.”
Napoleón Vilaboa, miembro del Movimiento 26 de Julio y asesor del
Che en La Cabaña, relata la ejecución de José Castaño Quevedo,
director del Buró de Represión de Actividades Comunistas (BRAC),
contra el cual no pesaban acusaciones criminales y al que llevó a la
oficina del Che: “Mientras daba vueltas alrededor de su mesa y de la
silla donde estaba el militar, Che sacó la pistola 45 y lo mató allí
mismo con dos balazos en la cabeza.”
Escalofriante relato del ex preso político Pierre San Martín,
testigo presencial del asesinato a sangre fría de un niño entre 12 y
14 años de edad llevado a cabo por el abominable monstruo de
crueldad Che Guevara en la fortaleza de la Cabaña en 1959: “…el
crujiente sonido de la puerta de hierro se abrió, al mismo tiempo
que lanzaban a una persona más al ya aglomerado calabozo…. ¿Y tú que
hiciste?, preguntamos casi al unísono. Con la cara ensangrentada y
amoratada nos miró fijamente, respondiendo: por defender a mi padre
para que no lo mataran, no pude evitarlo, lo asesinaron los muy
hijos de perra.
Cerca del paredón donde se fusilaba, con las manos en la cintura,
caminaba de un lado al otro el abominable Che Guevara. Dio la orden
de traer al muchacho primero, y lo mandó a arrodillarse delante del
paredón… El muchacho desobedeció la orden, con una valentía sin
nombre le respondió al infame personaje: “si me has de matar tendrás
que hacerlo como se mata a los hombres, de pie, y no como a los
cobardes, de rodillas.”
Caminando por detrás del muchacho, le respondió el Che: "con que
sois un pibe valiente"... desenfundando su pistola le dio un tiro en
la nuca que casi le cercenó el cuello.” [6]
El escritor rumano Stefan Bacie, en su poema “Yo no canto al Che”,
refiere como el Che lo invito a acompañarlo para ver como se fusila
en el paredón de La Cabaña.
Durante los tres primeros meses de la revolución cubana tuvieron
lugar 568 ejecuciones por fusilamiento. Incluso el New York Times lo
admite, según la periodista de dicho diario Hart Phillips, unos "400
en los dos primeros meses". El periodista Tetlon del London Daily
Telegraph escribe lo siguiente, "en ocasiones funcionaban cuatro
tribunales simultáneamente, sin abogados ni testigos de descargos,
llegando a juzgarse, contemplando la pena capital, hasta 80 personas
en juicios colectivos". Los procesos judiciales fueron farsas
desvergonzadas que espantaron y repugnaron a todos aquellos que los
presenciaron.
Jorge Castañeda en su biografía sobre Guevara, menciona que el
fallecido padre Iñaki de Aspiazu, un vasco católico simpatizante de
la revolución, habló de 700 víctimas. Luis Ortega escribe en su
libro “Yo soy el Che” que Guevara envió a 1,897 hombres al pelotón
de fusilamiento. En su libro "Che Guevara: una Biografía," Daniel
James escribe que el Che admitió haber ordenado "varios miles" de
ejecuciones durante los primeros años del régimen castrista. Félix
Rodríguez, un exagente de la CIA, que participó en la captura del
Che en Bolivia, le contó a Vargas Llosa que se enfrentó al Che tras
su captura recriminándole las "más o menos 2,000" ejecuciones de las
que fue responsable a lo largo de su vida. "Me dijo que eran todos
agentes de la CIA y no discutió la cifra." Como contraste en los
Juicios de Nurenberg, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, de los
24 líderes nazis acusados de crímenes de guerra solamente se aplicó
la pena de muerte a 11
de ellos.
En una carta escrita en mayo de 1959 a su amigo Julio “El Gaucho”
Castro se despide con esta frase: “Un fuerte abrazo del que es
llamado y que la historia llamará….CHE.” En una carta de Navidad a
sus padres escribió: “Caminamos sobre
la historia pura de la máxima categoría americana; somos el futuro y
lo sabemos, nosotros construimos con felicidad aunque hayamos
olvidado el afecto individual.” [1] En estas frases, que lo pintan
de cuerpo entero, se manifiesta su carácter arrogante, su delirio de
grandeza, al exagerar su propia importancia histórica.
Exportación de las guerrillas
Tras el triunfo de la revolución Castro y el Che iniciaron el
movimiento guerrillero a través de América Latina. De inmediato se
organizó un plan para iniciar focos guerrilleros con la asistencia
del Che, en Panamá, República Dominicana, Haití, Nicaragua,
Guatemala y Colombia.
La invasión de Panamá a finales de abril de 1959 fue un fracaso. Las
autoridades panameñas capturaron a dos invasores cubanos. El primero
de junio un grupo de nicaragüenses, entre los que se encontraba
Rodolfo Romero un viejo compañero del Che, bajo la dirección de
Joaquín Chamorro, salieron de La Habana hacia Nicaragua. Chamorro,
después de su captura, admitió la asistencia bélica proporcionada
por Castro y el Che. La invasión de Santo Domingo a mediado de junio
de 1959, culminó en un fracaso con un saldo de más de 200 muertos,
entre ellos los jefes cubanos de la expedición Jiménez Moya y
Horacio Rodríguez. En agosto de 1959 se inició en Haití el conflicto
que concluyó con la derrota de los invasores. En noviembre de 1960
oficiales del ejercito de Guatemala se alzaron en armas. Aviones de
la fuerza aérea cubana sobrevolaron el aeródromo militar de Zacapa,
uno de los dos lugares del levantamiento, aprovisionando a los
alzados. Este levantamiento también fracaso.
La intervención cubana en Venezuela en apoyo de la guerrilla,
fracasa cuando el ejército de Venezuela, en noviembre de 1963,
sorprende un desembarco oriundo de Cuba en la península de Paraguaná.
En febrero de 1964 la OEA condenó la interferencia del régimen
castrista en Venezuela.
La operación guerrillera comenzó en la Argentina a principio de 1964
en la provincia de Salta, con el periodista argentino Jorge Ricardo
Masetti al frente de la misma. Las operaciones fueron supervisadas
por el Che. En abril de 1964, el ejército argentino atacó el
campamento guerrillero con el resultado de varios guerrilleros
muertos, entre ellos el instructor cubano capitán Hermes Peña,
escolta del Che, y 14 fueron hechos prisioneros. Masetti desapareció
en la selva de Salta sin dejar rastros, y el foco guerrillero fue
eliminado. Cuando Alberto Granados le preguntó por qué estaba
deprimido a raíz de este descalabro, el Che le contestó: "Aquí me
veis detrás de un pupitre, jodido, mientras mi gente muere durante
las misiones a las que yo los he enviado."
José Pardo LLada en el libro "Fidel y el Che", escribe lo que le
dijo el Che en1959:
"Hay que acabar con todos los periódicos, pues no se puede hacer una
revolución con libertad de Prensa. Los periódicos son instrumentos
de la oligarquía.” El régimen controló, censuró o clausuró los
periódicos y revistas, las estaciones de radio y de televisión y la
industria del cine. La libertad de prensa e información fueron
suprimidas.
La misión diplomática comercial
En junio de 1959 Guevara fue enviado en una misión diplomática con
el objeto de establecer nuevas relaciones comerciales, realizar
ventas de azúcar y obtener armas en Yugoeslavia, no teniendo éxito
en ninguna de ellas. En el Cairo se entrevisto con Gamal Abdel Naser,
quien relató en sus memorias que Guevara le preguntó cuántas
personas habían emigrado de su país a raíz de la reforma agraria.
Cuando Naser contestó que nadie se había ido, el Che le dijo enojado
que “la manera de medir la profundidad del cambio es medir el número
de personas que sentían que no había lugar para ellos en la nueva
sociedad".
En la India su entrevista con el Primer Ministro Nehru, durante un
espléndido almuerzo, no aportó resultado en el establecimiento de
relaciones comerciales. En el Japón su propuesta de permutar azúcar
por productos japoneses fue rechazada en la entrevista que sostuvo
con el Ministro de Comercio Exterior. En su entrevista con el Primer
Ministro de Indonesia Sukarno, también fracasó en venderle azúcar y
en el establecimiento de relaciones comerciales. Durante su estancia
en Yugoslavia se entrevistó con Josip Broz Tito, no teniendo éxito
en obtener armas de dicho país.
En uno de los párrafos de la carta de julio de 1959 a su madre,
publicada en el libro escrito por su padre “Mi hijo El Che”, escribe:
“Soy el mismo solitario que era, buscando mi camino sin ayuda
personal, pero tengo el sentido del deber histórico. No tengo casa,
ni mujer, ni hijos, ni padres, ni hermanos, mis amigos son mis
amigos mientras piensen políticamente como yo.” En carta a su madre
hablando sobre su primer matrimonio en agosto de 1955: “Voy a tener
un hijo y me casaré con Hilda en estos días. La cosa tuvo momentos
dramáticos para ella y pesados para mí, al final se sale con la suya:
según yo por poco tiempo, según ella para toda la vida.” Cuando
Hilda Gadea, su esposa, llegó a Cuba con su hija en enero de 1959,
se encontró que su esposo estaba viviendo con su amante Aleida
March, la cual quedo embarazada. En mayo el Che se divorció de su
esposa y se casó con su amante en su oficina de La Cabaña. Después
de una breve luna de miel, salió del país en su primer viaje
diplomático. Durante los dos meses que estuvo ausente, nunca se
comunico con Aleida. Aleida le dijo lo siguiente a Anderson: “Che
fue un machista como la mayoría de los latinos.” Fue irresponsable
con su propia familia, abandonando a sus mujeres e hijos cuando más
lo necesitaban, por seguir sus aventuras guerrilleras. A Hilda le
pagó con la traición la ayuda y el amor que ella le dio. Las mujeres
jugaron un papel secundario en su vida.
La homofobia del Che
Che tuvo un rol principal en el establecimiento del primer campo de
trabajos forzados en la península de Guanahacabibes en el oeste de
Cuba, que se puso en marcha a finales de 1960, para confinar
personas que no habían cometido delito sujeto a castigo por la ley,
revolucionario o de otro tipo. Che defendió dicha iniciativa
diciendo: “Nosotros solamente enviamos a Guanahacabibes aquellos
casos dudosos de los que no estamos seguros que deban ser
encarcelados... Nosotros mandamos a Guanahacabibes a la gente que no
debería ir a la cárcel, gente que ha cometido crímenes contra la
moral revolucionaria, en mayor o menor grado,…” [5]
“Este campamento fue el precursor del confinamiento sistemático, a
partir de 1965 en la provincia de Camagüey, de disidentes,
homosexuales, católicos, Testigos de Jehová, sacerdotes afro-cubanos,
y otras "escorias" por el estilo, bajo la bandera de las Unidades
Militares de Ayuda a la Producción (UMAP). Hacinados en autobuses y
camiones, los "desadaptados" serían transportados a punta de pistola
a los campos de concentración organizados sobre la base del modelo
de Guanahacabibes. Algunos nunca regresarían; otros serían violados,
golpeados, o mutilados; y la mayoría quedarían traumatizados de por
vida, como el sobrecogedor documental de Néstor Almendros Conducta
Impropia se lo mostrara al mundo un par de décadas atrás.” [5]
La homofobia del Che se manifiesta en el cartel colocado a la
entrada del campo de trabajos forzados, donde confinaron a los
homosexuales, donde se leía “El trabajo os hará hombres'', replica
del lema “El trabajo os hará libres” utilizado en los campos de
concentración nazis. Pretendía corregir el comportamiento homosexual
aplicando castigos rigurosos con el objeto de modificar dicha
desviación social, la cual no constituye un delito castigado por la
ley.
En las décadas de los ochentas y noventas este sistema extra
judicial, de confinamiento forzado, fue también aplicado a las
victimas de SIDA.
En una alocución por la TV el 26 de junio 1961, cuando era Ministro
de Industrias dijo:
"Los trabajadores cubanos tienen que irse acostumbrando a vivir en
un régimen de colectivismo y de ninguna manera pueden ir a la huelga."
El 15 de diciembre de 1959 se inició el proceso de las purgas de los
líderes sindicales, democráticamente elegidos en el X congreso de la
CTC llevado a cabo en noviembre de 1959, destruyendo el movimiento
sindical obrero y aboliendo los derechos laborales conquistados por
los obreros.
Fracasos económicos, diplomáticos y políticos
En 1961 Guevara fue designado ministro de industria, y en el nombre
de la diversificación, el área cultivada fue reducida y la mano de
obra utilizada en otras actividades. La industrialización cubana
falló debido a la falta de materias primas para las nuevas
industrias. Ya para 1963 se abandonaron las esperanzas de
industrialización, y durante el periodo de 1961 al 1991, la Isla
sobrevivirá gracias al subsidio soviético de 120 millones de dólares.
Como jefe de la delegación diplomática cubana en la Conferencia de
Punta del Este, en su discurso durante la quinta sesión plenaria del
CIES, el 8 agosto de 1961, predijo lo siguiente: “La tasa de
crecimiento que se da como una cosa bellísima para toda América es
2,5% de crecimiento neto… Nosotros hablamos de 10 % de desarrollo
sin el menor temor, 10% de desarrollo es la tasa que prevé Cuba para
los años venideros…. ¿Que piensa tener Cuba en el año 1980? Pues un
ingreso neto per cápita de unos tres mil dólares, mas que los
Estados Unidos actualmente.” El per cápita de Cuba sólo fue de
$1,873 dólares en el año 2004. “En el periodo comprendido de
1960-1979, Cuba fue el único país de la América Latina con un
crecimiento promedio negativo del PIB. Durante la década del
1991-2000, el promedio anual del PIB fue de -1.9%, en penúltimo
lugar entre los países de la América Latina, superando solamente a
Haití.” [7] Este resultado es atribuible en gran parte a los
nefastos efectos de la política económica del Che sobre la economía
cubana. En 1959 Cuba ocupaba el segundo lugar de riqueza económica
en América Latina.
Durante la crisis cubana de los cohetes en Octubre de 1962, el Che
apoyó a Fidel en la confrontación nuclear con Estados Unidos. Che se
decepcionó cuando Khrushchev decidió retirar los cohetes, ante la
amenaza de una guerra nuclear (Ver las Memorias de Nikita
Khrushchev). Él le dijo al reportero británico Sam Russell del
periódico socialista Daily Worker que “si los cohetes hubiesen
permanecido (en Cuba), los hubiésemos utilizado contra el mismo
corazón de los Estados Unidos incluyendo a Nueva York. Nunca debemos
establecer la coexistencia pacífica. En esta lucha a muerte entre
dos sistemas tenemos que ganar la victoria final. Debemos andar el
sendero de la liberación incluso si cuesta millones de víctimas
atómicas.”
En su odio profundo contra los Estados Unidos, este monstruo de
crueldad no vaciló en apoyar el confrontamiento nuclear sin
importarle un comino que tal acción sellara el aniquilamiento del
pueblo cubano y de gran parte de la humanidad.
El 11 de diciembre de 1964, durante su primera intervención en la
Asamblea General de las Naciones Unidas el Che dijo: “Como marxistas
hemos sostenido que la coexistencia pacífica entre las naciones no
incluye a la coexistencia entre los explotadores y el explotado.”
Como representante del gobierno cubano fue severamente atacado
debido a las ejecuciones por fusilamiento sin ningún tipo de proceso
judicial y evidencia requerida en un Estado de derecho. Guevara, en
su segunda intervención, haciendo uso del derecho de replica,
respondió: “Nosotros tenemos que decir aquí lo que es una verdad
conocida, que la hemos expresado siempre ante el mundo:
Fusilamientos, sí, hemos fusilado, fusilamos y seguiremos fusilando
mientras sea necesario. Nuestra lucha es una lucha a muerte”. [7]
Esto demuestra su intransigencia con sus enemigos políticos, que
estaba dispuesto a hacer correr la sangre y que no le preocupaba el
llevar a la muerte a millones de personas.
En respuesta a una pregunta de Richard Hottelet de la CBS en el
programa Ante la Nación, New York, 14 de diciembre de 1964, el Che
contesto: "El camino para la liberación de los pueblos, que será el
camino del socialismo, marchará a través de las balas en casi todos
los países, y puedo pronosticar con tranquilidad que usted será
testigo". El Che, defensor de la violencia política, fracasó una vez
más.
Guevara, en su viaje a Argelia en 1965, cuando le preguntaron por el
fracaso económico dijo cínicamente: "Tenemos un país para
experimentar; nos equivocamos pero seguiremos experimentando, hasta
que aprendamos". Dicho aprendizaje ha ocasionado el fracaso
económico más grande de toda la América Latina. [8]
En febrero de 1965 en la Conferencia Internacional de Argel, el Che
en su discurso criticó a la Unión Soviética por adoptar lo que él
denominaba la “ley del valor”, la cual organiza y regula la
actividad humana en la sociedad capitalista. Esto contribuyó al
enfriamiento de las relaciones entre Cuba y la Unión Soviética. El
embajador soviético en la Habana se quejó a Castro por la conducta
antisovietica del Che. Castro disentió públicamente de la política
antisovietica del Che, y esto dio lugar a que el Che fuera apartado
del círculo gobernante.
En marzo de 1965 Castro envía al Che, que había adoptado una
posición pro china, al frente de una delegación a China con el
objeto de restaurar las deterioradas relaciones. Los camaradas
chinos argumentaron que la revolución estaba influenciada por los "revisionistas
soviéticos", argumento que fue rechazado por la delegación cubana,
ocasionando el estancamiento de las conversaciones. El Che, una vez
más, falló en su encomienda.
Fracaso guerrillero en el Cong
Guevara en su diario sobre su experiencia guerrillera en el Congo,
entre abril y diciembre de 1965, comienza con esta observación:
“Esta es la historia de un fracaso.” La aventura que él dirigió en
el Congo fue un fiasco.
El Che, jefe blanco de la expedición compuesta por dos batallones de
soldados negros cubanos, alrededor de 200, descubrió que la negrura
no garantizó la mezcla de cubanos con los africanos y el régimen
cubano reconoció posteriormente como un error que todos los soldados
enviados fueran negros. Los negros cubanos eran extranjeros, que se
consideraban superiores y trataban con gestos de desprecio a los
congoleses, que resentían dicho trato
En el epílogo, Guevara se pregunta ¿Qué tuvo la revolución realmente
que ofrecer a los campesinos de la fértil zona oriental del Congo?
Concluyó que el número minúsculo de trabajadores industriales
estaban satisfechos y no eran revolucionarios, los campesinos no
sufrían hambre de tierra, las tropas no creyeron que estarían
luchando contra los americanos y la raza tampoco fue un factor de
suficiente motivación. Una y otra vez se refirió a una falta de
liderazgo entre los africanos, la incompetencia de los combatientes
congoleses y una desorganización terrible. Las evaluaciones del Che
lo hacen parecer como un racista. También está claro que los
objetivos de los africanos eran muy diferentes a la suyos.
Mensaje a la Tricontinental
En su "Mensaje a la Tricontinental", el 16 de abril de 1967, escribe:
"El odio como factor de lucha, el odio intransigente al enemigo, que
impulsa más allá de las limitaciones naturales del ser humano y lo
convierte en una efectiva, violenta, selectiva y fría máquina de
matar. Nuestros soldados tienen que ser así; un pueblo sin odio no
puede triunfar sobre un enemigo brutal.”
“Hay que llevar la guerra hasta donde el enemigo la lleve: a su
casa, a sus lugares de diversión; hacerla total. Hay que impedirle
tener un minuto de tranquilidad, un minuto de sosiego fuera de sus
cuarteles, y aun dentro de los mismos: atacarlo dondequiera que se
encuentre; hacerlo sentir una fiera acosada por cada lugar que
transite. Entonces su moral ira decayendo.”
“El camino pacífico está eliminado y la violencia es inevitable.
Para lograr regímenes socialistas habrán de correr ríos de sangre y
debe continuarse la ruta de la liberación, aunque sea a costa de
millones de victimas atómicas". [9] Fanático defensor de la
filosofía comunista, que ha sido responsable, según las cifras de El
Libro Negro del Comunismo, por la muerte de cerca de100 millones de
personas.
Estas declaraciones reflejan claramente su sentir e intenciones, la
de matar en cualquier sitio de manera fría e indiscriminada. Este
uso del odio e incitación a la violencia, no es sino otra
manifestación de la doctrina del terrorismo a través de los siglos
para justificar el asesinato en masa y la tortura.
Derrota en Bolivia
El Diario del Che en Bolivia contiene las siguientes observaciones:
“la base campesina sigue sin desarrollarse; aunque parece que
mediante el terror planificado, lograremos la neutralidad de los más,
el apoyo vendrá después. No se ha producido una sola incorporación…
la movilización campesina es inexistente, salvo en las tareas de
información que molestan… el Ejército está mostrando más efectividad
en su acción y la masa campesina no nos ayuda en nada y se
convierten en delatores… Las masas campesinas no nos ayudan en
absoluto” fue la melancólica conclusión de Guevara en su diario
boliviano. El 26 de septiembre anota en su diario, “derrota“, en
referencia a “la nefasta emboscada de La Higuera.”
En referencia a los campesinos bolivianos, anota en su diario el 19
de junio de 1967: “a los habitantes hay que cazarlos para poder
hablar con ellos pues son como animalitos.” Genio y figura hasta la
sepultura.
Che, al momento de ser hecho prisionero, que estaba herido levemente
de bala en una pierna, con el rifle en alto gritó a sus captores en
Bolivia, “No disparen, soy el Che, valgo más vivo que muerto.” Su
pistola de 9 milímetros disponía de todas sus balas al cederla. ¿Por
que se dejo coger prisionero y no peleó hasta la última bala? Creyó
que no lo iban a matar, que lo juzgarían como hicieron con Régis
Debray y Ciro Bustos.
Solamente atinó a rogar por su vida, no supo morir como un hombre.
Félix I. Rodríguez, exagente cubano de la CIA, en conversación con
el escritor Jacobo Machover le contó lo siguiente: “Después él me
dijo que ellos fusilaban en Cuba a todos los agentes extranjeros que
invadían el país. Entonces le dije: Comandante, es irónico que usted
me lo diga, porque usted es extranjero y ha invadido Bolivia.”
Félix, que se encontraba dando asesoramiento de inteligencia al
ejército boliviano en la zona donde el Che operaba, relata que
cuando entró al local donde el Che se encontraba prisionero le dijo
que iba a ser ejecutado: “Comandante, lo siento, yo he tratado, pero
son órdenes superiores del alto mando.” Se puso blanco como un papel.
Nunca vi a una persona perder la expresión de la cara como lo hizo él, entonces me dijo “es mejor así, yo nunca debí de haber caído
preso.”
En La Cabaña el Che solía mandar a los reos al paredón de
fusilamiento escribiendo esta nota, "dale aspirina". En Bolivia le
dieron una dosis de su propia medicina.
Fidel Castro utilizó al Che como vocero en la propagación de su
plataforma antiimperialista y lo sigue utilizando cínicamente al
glorificar su memoria después de muerto con fines propagandísticos.
Daniel Alarcón (Benigno) Ramírez que lucho a las órdenes del Che en
la Sierra Maestra, y lo acompaño en las aventuras guerrillera del
Congo y Bolivia, siendo uno de los sobrevivientes de dicha última
aventura, actualmente exilado en Francia, en una entrevista para la
TV admitió que el Che había sido traicionado en Bolivia: “Sí, el Che
y todos nosotros fuimos traicionados en Bolivia. Fidel nos envió
calculada y fríamente a un lugar remoto, bien seleccionado por su
falta de recursos humanos y de alimentos. Después, nos cortaron los
suministros de armas, inteligencia, comida y, finalmente: las
comunicaciones… Ya no tenía dudas, había comprobado en forma
irrefutable la traición. Todos habíamos sido manejados como peones
sin valor, en el tenebroso tablero de ajedrez de Fidel, en forma
cruel e inhumana.”
Evo Morales llevó a cabo una celebración oficial del 40 aniversario
de la muerte del Che, celebración que fue repudiada por más del 50%
de los bolivianos, opuestos al elogio de una invasión de extranjeros
que a mató 55 soldados bolivianos y varios civiles. El general Gary
Prado, quien dirigió la columna militar que capturó al Che, dijo que:
"El homenaje debería ser hecho a los soldados que derrotaron a ese
invasor."
Epílogo
Aquellos que pretenden ocultar su condición de asesino despiadado y
considerarlo un mártir dispuesto a dar la vida en defensa de sus
ideas, no tienen en consideración su disposición de arrebatársela a
quines no la compartían. José Martí en carta a Máximo Gomes, del 20
de octubre de 1884, expresa su pensamiento de que el solo echo de
dar la vida por sus ideas no es causa suficiente de glorificación:
“...porque tal como es admirable el que da su vida por servir a una
gran idea, es abominable el que se vale de una gran idea para servir
a sus esperanzas personales de gloria o de poder, aunque por ellas
exponga la vida. El dar la vida solo constituye un derecho cuando se
la da desinteresadamente.” Cita de Mahatma Gandhi: “Estoy dispuesto
a morir, pero no hay ninguna causa por la cual este dispuesto a
matar.” ¿Como es posible que hoy en día hayan personas que sientan
admiración por este asesino en masa?
El Che falló en todas las empresas que acometió; en su inconclusa
carrera de medicina, profesión que nunca ejerció, como economista al
frente del Banco Nacional y del Instituto Nacional de la Reforma
Agraria, como Ministro de Industrias donde presidió sobre el fracaso
de la industrialización, como diplomático y político en sus
relaciones con la Unión Soviética, China, Japón, India, Egipto y
Yugoslavia, en la organización de guerrillas en Latinoamérica, en
sus aventuras guerrilleras en el Congo y Bolivia e incluso en la
fomentación de la violencia.
En una entrevista concedida por su novia María del Carmen Ferreira "Chichina",
a La Voz del Interior, resumió el fracaso del Che con estas palabras
lapidarias: “Pobre Ernesto, no tuvo éxito en nada: ni como médico,
ni como fotógrafo, ni como economista, ni como propagador de la
revolución.”
En una carta al editor del semanario uruguayo Marcha, publicada en
marzo de 1965 con el titulo de “El Socialismo y el hombre en Cuba”,
donde el Che trata el tema del "hombre nuevo" dice: “Para construir
el comunismo, simultáneamente con la base material hay que hacer al
hombre nuevo…. es la dictadura del proletariado ejerciéndose no sólo
sobre la clase derrotada, sino también individualmente, sobre la
clase vencedora... El hombre, en el socialismo, a pesar de su aparente
estandarización, es más completo…Así logrará la total conciencia de
su ser social, lo que equivale a su realización plena como criatura
humana, rotas todas las cadenas de la enajenación.”
Durante los últimos 50 años los jóvenes han sido indoctrinados con
el concepto del hombre nuevo, que ha de ser completo, desinteresado,
comunitario y de valores morales antes que materiales. El resultado
ha sido un hombre nuevo incompleto, envidioso, individualista, de
doble moral y materialista.
En Cuba los escolares inician las clases cada día con la siguiente
consigna de adoctrinamiento: “Pioneros por el comunismo, seremos
como el Che.” Serán entonces los hombres nuevos; fanáticos,
mentirosos, asesinos y fracasados, alcanzando la plena realización
de ser como el Che. A los niños en edad escolar se les inculca el
odio a los enemigos de la revolución. Este pensamiento de José Martí
condena el odio: “Los odiadores debieran ser declarados traidores a
la República. El odio no construye.”
El Che fue fanático, dogmático, rencoroso, envidioso, arrogante,
soberbio, mentiroso, racista, carente de moral, mercenario y
homófobo; un asesino sanguinario, “una fría máquina de matar”, que
el fanatismo de la izquierda ha convertido en héroe.
Referencias:
[1] Jon Lee Anderson, “Che Guevara: A Revolutionary Life”. (New
York: Grove Press, 1997)
[2] Ernesto Guevara: “Diarios de motocicleta: Notas de viaje por
América latina”( Ocean Press, 2004)
[3] Ernesto Guevara: “Otra Vez: Diario inédito del segundo viaje por
Latinoamérica.”
(Ocean Sur, USA, 2007)
[4]Carlos Franqui, “Diario de la revolución cubana”. (Ediciones R.
Torres, Barcelona, 1976)
[5] Alvaro Vargas Llosa, “La Máquina de Matar: Che Guevara, de
Agitador Comunista a Marca Capitalista”, The New Republic, 11/7/2005
[6] Pierre San Martín, “Como asesinaba el Che Guevara”, El Nuevo
Herald, Diciembre 28, 1997.
[7] Video link: http://www.youtube.com/watch?v=HqAvuiyzz5k. Este
fragmento fue extraído del video “Che Guevara: Anatomía de un mito”.
[8] Humberto (Bert) Corzo, “Comparación Estadística Del Producto
Interno Bruto (PIB) Cubano Durante La Cuba Republicana Y La Cuba De
Hoy, La Nueva Cuba, Julio 30, 2002
[9] Che Guevara: Táctica y Estrategia de la Revolución Cubana.
Revista Verde Olivo, Prensa Latina 8-10-68.
*Humberto (Bert) Corzo nació en Matanzas, Cuba. Graduado de La
Universidad de La Habana con el título de Ingeniero Civil en 1962.
Desde su arribo a los Estados Unidos en 1969 como exiliado se
estableció en Los Angeles, California, obteniendo la registración
como Profesional Engineer en 1972. Cuenta con más de 45 años de
experiencia en la rama de la Ingeniería Estructural. Miembro de la
American Society of Civil Engineers y la Cuban-American Association
of Civil Engineers.
Enero,
2009 |
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