Alza de tarifas eléctricas y de tributos locales
El aumento de impuestos ya empezó (...y un poco la resistencia)
 Los políticos no se limitan a exigirte tu dinero: quieren tu espíritu. Quieren doblegarte con sus impuestos hasta que te veas indefenso. James Dale Davidson Líder de la Unión de Contribuyentes de Estados Unidos |
LA NEGACIÓN es una primera reacción muy humana ante los riesgos y amenazas, por eso hay que machacar duro e insistentemente sobre los peligros reales, para derribar esta barrera que nos hace inermes ante ellos.
Hay personas informadas que siguen sin querer admitir que la clase política prepara un nuevo gran atraco contra los contribuyentes y que es inminente.
A esas personas les tenemos noticias: el atraco ya empezó, por la vía del aumento de las tarifas eléctricas y de los tributos locales.
Uno de los acuerdos que pactaron los capos de las facciones de clase parásita (que se conoce con el eufemismo de “clase política”)fue la “revisión integral a la política de subsidios (…) actualmente existen subsidios que tienen resultados regresivos pues asignan mayores recursos a las personas que más tienen (…) algunos ejemplos de estos subsidios se encuentran en el sector energético (…) no se entregarán más subsidios a la población de altos ingresos.”(Compromiso 73 del Pacto por México).
Y los vividores cumplieron de inmediato su amenaza: en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2013 el “subsidio” al consumo de electricidad será de 51 mil 535 millones de pesos, 39% menos que el monto aprobado para 2012 y que fue 82 mil 68 millones de pesos.
¿Cómo repercutirá esto en los usuarios (por la fuerza) del monopolio estatal de la Comisión Federal de Electricidad? A través del aumento de hecho a las tarifas, especialmente para aquellos de mayor consumo y que se ubican en los deciles de mayor ingreso. Usted pagará más, aunque consuma lo mismo.
En el recibo o factura del consumo eléctrico hay una sección que siempre debe movernos a la indignación, la del llamado “Apoyo gubernamental”. Por ejemplo, en un recibo reciente se establece que el total a pagar por el consumo en un departamento fue de 520 pesos, pero se advierte que el “costo de producción” de la electricidad del usuario del caso es de 1,453 pesos, por lo cual la “aportación gubernamental”es de 933 pesos.
Es decir, según el gobierno usted debería pagar 1,453 pesos por bimestre, pero él en su infinita magnanimidad le regala a usted –ricachón sin conciencia social- 933 pesos en lugar de dárselo a los pobres. Entonces el gobierno en 2013 ya no será tan generoso con usted y por idéntico consumo al del ejemplo le cobrará 723 pesos (39% más) y en 2014 de ser posible le cobrará 1,453 pesos (claro, si es el que el “costo de producción” no aumenta).
Pero el supuesto “subsidio” que usted recibe, el cual casi duplica lo que usted paga y que supuestamente es ejemplo de “regresión”fiscal, según los gobernantes y sus kapos en el sector privado, es una completa mentira.
Con todo y el supuesto “subsidio” usted como usuario por la fuerza paga mucho más por la electricidad de lo que paga un usuario por el mismo consumo en Estados Unidos, por ejemplo, en donde el servicio eléctrico es privado. Simplemente la CFE es una empresa altamente ineficiente (léase al respecto “CFE Una Empresa de Clase Mundial”, en: http://mexicoliberal.blogspot.
Suponiendo sin conceder que fuera cierto que los usuarios de la CFE recibimos un subsidio, no lo obtenemos del gobierno, sino de los contribuyentes de los tres deciles de mayores ingresos, quienes no sólo sufragan la totalidad de los cobros que les hace monopolio estatal sino de la mayor parte de los cobros que hace a quienes se sitúan en los otros deciles.
Pero como en el caso de la gasolina, tal subsidio a los consumidores ni siquiera existe, lo que existe es un brutal subsidio de los contribuyentes y los consumidores a la ineficiencia de la CFE. De modo que reducir el falso subsidio y aumentar los cobros no es sino un alza impositiva disfrazada.
Ante ello debemos exigir la libertad de los consumidores a contratar los servicios de empresas privadas para obtener el fluido, con lo cual dejaríamos de subsidiar a la CFE y al sindicato (el SUTERM) y pagaríamos menos.
En Nuevo León el domingo 23 de diciembre de 2012, el Congreso Local reinstauró el cobro de la tenencia a vehículos automotrices de modelos 2009 y posteriores y un aumento del 50% al Impuesto Sobre la Nómina (ISN), cuya tarifa pasará de 2% al 3% sobre los pagos de salarios que hagan los empleadores.
El gobernador Rodrigo Medina chantajeó con que sin el aumento de impuestos no se podría sostener su engendro policíaco llamado Fuerza Civil, con la que se busca suplantar a docenas de corporaciones policiales corruptas por una sola (igualmente corrupta e ineficaz). Los recursos necesarios bien hubieran podido salir de un aumento del alcance del programa de“austeridad” del gobierno estatal. Esto da una lección: cuando los políticos acuerdan“austeridad” es porque vendrá el alza de impuestos.
El Partido Acción Nacional desató una campaña en contra de este aumento del expolio fiscal, en virtud del gran rechazo popular que ha tenido, pero a la mera hora sus diputados locales aprobaron la tenencia y no se esforzaron mucho contra el incremento al ISN. Similar conducta tuvo el PAN ante análogos aumentos aprobados o proyectados en otros estados.
Pero se trata de pura hipocresía, pues la mayoría que tiene el PAN en el Congreso Local de Sonora aprobó un aumento de impuestos mucho más brutal que el de Nuevo León. Por iniciativa del gobernador Guillermo Padrés se aceptó: un impuesto del 15% a los servicios estatales; el pago de tenencia vehicular equivaldrá a 3% del valor de la factura (en 10 años los vehículos habrán costado ¡30% más de lo que costaron al comprarlos!); aumento de 47% de las tarifas de agua potable e incremento en ¡mil por ciento! en el costo de las actas de defunción expendidas fuera del horario de 8 a 15 horas (¡hay que morirse sólo en ese horario!), entre otros.
En otras entidades federativas y en decenas de municipios ha habido otros aumentos y nuevos impuestos, sobre lo cual preparamos un informe. Lo único bueno que ha traído el nuevo asalto fiscal en curso es el surgimiento de movimientos ciudadanos espontáneos de rechazo, que presentan el reto de articular en un gran movimiento nacional. Por eso en 2013 la consigna será:
