Enrique Peña puja en la subasta…con tu dinero
Unión Nacional de Contribuyentes "Atlas"
http://www.unionatlas.org/
Las promesas que hicieron ayer los políticos son los impuestos de hoy
William L. Mackenzie
El gobierno es incapaz de darnos algo sin despojarnos de algo más
Henry Hazlitt
Tan pronto Enrique Peña Nieto tomó posesión de su cargo, sacó las uñas. Las primeras medidas de su gobierno revelan lo que será el sello de su administración: pujar muy alto en la subasta populista, para que su partido se mantenga en el poder otros 70 años.
Peña no hace sino seguir la lógica de un régimen democrático, que no republicano, en el cual sólo es posible obtener el voto ofreciendo más prebendas que los otros competidores políticos. Y -por supuesto-las dádivas gubernamentales tienen un costo que los políticos le imponen a los contribuyentes.
De las primeras medidas anunciadas por Peña, las siguientes son las que más deben inquietar a los contribuyentes en quienes recae la mayor carga fiscal:
1) Programa Nacional de Prevención del Delito. La única manera efectiva de prevenir el crimen es mediante el abatimiento de la impunidad y con la vigilancia pro-activa de la policía. Pero no es eso lo que los políticos entienden por prevención, sino el repartir subsidios, como el programa “Todos somos Juárez” y otros que patrocina el Centro Nacional para la Prevención del Delito. Estos programas no sólo no ayudan a prevenir el delito, sino que son profundamente inmorales, pues parten de la premisa justificadora del crimen de que los delincuentes delinquen porque los demás tenemos “su” dinero. Entonces más vale darles por las “buenas” a lo que tienen “derecho”, a nos lo quiten por las malas.
2) Cruzada nacional contra el hambre. No hay que esperar mucho para saber de qué se trata esto. Basta con reconocer la firma de su autora, de la nefasta Rosario Robles, que antes de venderle a Peña la idea del “almuerzo gratis” la vendió a los políticos del PRD. Pero no hay “almuerzo gratis”, usted lo pagará.
3) Ampliar el programa "70 y más" para que los mayores de 65 años tengan una pensión ¡Qué bueno tener un pensión desde el 65 años!, es más ¿¡por qué no desde los 35? Pero que cada individuo, el único responsable de su vida, se lo financie, ¿por qué los demás hemos ser obligados a hacerlo?
4) Seguro de vida para mujeres jefas de familia. Lo mismo. Qué bueno es asegurar el futuro de los allegados, en caso de ausencia. Pero, porqué hemos de ser los demás obligados a financiarlo con nuestro esfuerzo.
5) Derecho constitucional de acceso a la banda ancha. Un derecho no es otra cosa que la obligación de los otros para con uno, titular de ese derecho y que al ejercerlo está obligado a la reciprocidad. Tenemos derecho a adquirir servicio de banda ancha sin que nadie nos lo impida. No a que nos los paguen. El acceso a banda ancha crece de forma exponencial, sin necesidad de nadie sea despojado de su dinero, ¿por qué han de despojarnos ahora?
6) Nuevas rutas de ferrocarril. Este es un servicio privado y si hubiera un mercado para nuevas rutas los particulares ya las estarían construyendo. La prueba de que no son necesarias es que el gobierno las quiere imponer.
El juego político de Peña es astuto: primero vienen las nuevas dádivas para ganar apoyos, para luego justificar el aumento de impuestos, sin el cual la puja en la subasta populista es insostenible.
Ante las medidas anunciadas los contribuyentes debemos decir: no más subsidios, no aumentar los existentes, ¡no más impuestos! Y si los gobernantes quieren aumentar los subsidios, que lo hagan con el recorte de sus salarios y prebendas; tomémosles la palabra sobre la “austeridad”.