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¿Otro Obama a la Presidencia en 2016?
Por Jadir Hernández
Miami, 29 de octubre de 2016
Estará Michelle Obama acariciando el sueño de quedarse en la Casa Blanca, pasarle factura a los Clinton y condenarnos a todos a comer brócoli durante su eventual presidencia. Barack Hussein no es precisamente un hombre sincero. Él insiste en que Michelle no tiene paciencia y que no le interesa llegar al poder. Pero hay que recordar como Obama se cansó de repetir que no iba a liberar a los espías castristas de la red Avispa, y el 17 de diciembre del 2014, a las 10:00 AM nos enteramos de que los 3 espías indultados iban rumbo a Cuba, después de una negociación secreta con la dinastía cubana por más de 18 meses.
¿Qué pasaría si un juez federal dicta una imputación contra Hillary Clinton? De acuerdo con la ley, si el FBI recomienda llevar el caso de los emails de Clinton a la corte criminal, un juez debe convocar a un gran jurado para determinar si procede o no una acusación formal contra Hillary. Si el gran jurando falla a favor de abrir una acusación oficial, la exsecretaria de estado debe renunciar a su candidatura a la presidencia.
En ese caso, le corresponde a la
plana mayor del Comité Nacional
Demócrata
determinar a dedo quienes integrarían
la nueva fórmula
Presidente y Vicepresidente. Tendrían
que convocar a nuevas elecciones y hacer una nueva boleta a nivel
nacional, solo para la elección
presidencial. En ese caso hay varios prospectos: Bernie Sanders,
quien no le gusta al Comité porque
en realidad no es demócrata
sino un senador independiente y ultra izquierdista; Elizabeth
Warren, considerada una esperanza comunista; o, adivinen quien,
alguien fresco, con preparación
y experiencia en la casa blanca, con un carácter
insoportable pero tolerable para ambos extremos del partido demócrata:
Michelle Obama. ¿Sería una solución aceptable para Barack H. pasar a ser Primer caballero en la casa blanca? ¿Les gustaría seguir viviendo en la Casa Blanca a las dos infantas con nombres rusos del matrimonio Obama? Eso lo sabremos en los próximos días, pero no esperemos sinceridad por parte de Obama y mucho menos de la hasta ahora candidata a la presidencia, Hillary Clinton. Eso es como pedir peras a un olmo rojo rojito, como diría el difunto dictador Hugo Chávez Frías.
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