|
|||
El discurso necesario para la marcha y concentración de efectuarse en Cuba Mi querido pueblo, hoy es un día muy especial que marcará pautas en la historia cubana. Hoy se ha logrado la primera concentración cívica de personas que han venido por su propia voluntad después de más de 60 años de movilizaciones forzosas y obligatorias. Y una vez más queremos aclarar, no venimos bajo el permiso de nadie, solo hemos cumplido con la formalidad de informar de nuestra movilización porque es una práctica universal y no podemos ignorar que el régimen tiene el poder y el privilegio de la fuerza en estos momentos. Compatriotas, no solo con marchas se cambian los regímenes totalitarios, hay que hacer las marchas y todo lo demás, tenemos que estructurar las fuerzas del cambio y montar nuestras propias estructuras de gobernabilidad. No podemos pedir a la comunidad internacional que desconozca la legitimidad del régimen si no hay estructuras democráticas que la comunidad internacional pueda reconocer. Tenemos que existir como alternativa de cambio, hacia allá vamos, no podemos perder la fe en el cambio porque las cosas no se logren de inmediato, hay que preparar y propiciar el cambio, adelante compatriotas, hoy comienza nuestro día, porque si lo hacemos, nuestro día ya viene llegando. Hoy nos hemos reunidos para comenzar el duro camino hacia un cambio, hoy es el día de decirle no al continuismo que por años nos ha llevado por el camino de la represión política, de fusilados, ahogados en el mar o destrozados por minas en la frontera de la Base Naval tratando de escapar de esa misma represión, del hambre, de la falta de medicamentos, la falta de oportunidades, de un país vendido a los intereses extranjeros. No, no más continuismo, vamos por el cambio, pero por un cambio hacia la prosperidad. No tenemos que inventar nada nuevo, nuestro pueblo sabe cómo salir adelante, lo ha demostrado antes y después en todos los países que han llegado los cubanos. Con la libertad, nuestro pueblo sabe qué hacer. No es el bloqueo económico de Estados Unidos como llama el régimen, no. Es la falta de libertad, incluida la libertad económica. Cuba ocupa el lugar 176 en el Indicie de la Libertad Económica Mundial, solo delante de Venezuela y Corea del Norte que ocupan los dos últimos lugares, Venezuela el 177 y Corea del Norte el 178. Hoy queremos demostrar al régimen que hay la voluntad de todo un pueblo de no seguir el camino trazado por esa dirigencia histórica, que por suerte la gran mayoría ha muerto y la que queda ya está rumbo al cementerio. Pero es el momento de evitar que ese poder absoluto se prolongue a través de nuevos oportunistas y formen una nueva casta. Compatriotas, hay que aclarar que hoy no es el fin de nuestra meta, hoy es el comienzo del cambio hacia la prosperidad, pero hay que vencer el obstáculo del régimen que se nos impone. Reiteramos nuestra voluntad de lograr un cambio pacífico a la democracia, pero advertimos que no se puede jugar con la dignidad y nobleza de nuestro pueblo, que por años ha mostrado su espíritu de rebeldía. No se alarmen cuando el pueblo indignado asuma cualquier tipo de lucha para defenderse. Acuérdense que ustedes se aprovecharon de esa rebeldía de nuestro pueblo para llegar al poder. Muchas personas humildes murieron buscando un futuro mejor para Cuba, futuro que ustedes le arrebataron y lo convirtieron en un negocio familiar y de sus allegados. Martí dijo: “Del tirano di todo, di más” y nosotros decimos: Contra la Tiranía haz todo, haz más. Hermanos hoy solo quisimos mandarle un mensaje al mundo de que nuestra lucha tiene un interés de cambios pacíficos, que necesitamos de su apoyo para lograrlos, que aspiramos y tenemos el derecho de vivir en la democracia que ellos disfrutan, pero que tampoco nos vamos a quedar de brazos cruzados mirando como nuestro pueblo muere de necesidad e impotencia. No, no lo vamos a permitir. Y si no nos dejan otro camino, nuestro pueblo sabe cómo lograr su libertad, bajo el enunciado de que la libertad “no se mendiga, se conquista con el filo del machete”. Dios bendiga a Cuba, Patria y Vida
|