El cierre de de RCTV es el principio del fin de la democracia venezolana. ¿Cuál es el problema fundamental que nos plantea Hugo Chávez? ¿Que apoya los movimientos subversivos de América Latina? ¿Que está regalando cientos de millones del dinero del pueblo venezolano? ¿Que sea discípulo de Fidel Castro? ¿Que se declare amigo de la teocracia iraní, la que dice que el Holocausto no existió y que hay que exterminar a los judíos? ¿Que está en contra del movimiento sindical? No, nada de eso. Su gobierno puede hacer todos los disparates que le parezcan. En fin de cuentas, la mayoría de los venezolanos lo eligió. El problema que plantea Chávez es que quiere aprovechar su momentánea mayoría para liquidar la democracia venezolana. El inmenso peligro que representa es que ha demostrado estar decidido a imponer una dictadura totalitaria.

Cuando un grupo logra imponer una dictadura totalitaria, el pueblo pierde todo su poder sobre el gobierno, se ve totalmente impotente y a la merced de la camarilla gobernante. La popularidad del gobierno pierde toda importancia. Ahora puede adoptar, sin vacilación, las políticas más impopulares del mundo. Ya no depende de la aprobación o simpatía de las masas. Le basta con la represión. Por otra parte, es fácil fingir apoyo popular para consumo exterior. Es por eso que los venezolanos tienen que estar conscientes de que, una vez que establezca la dictadura comunista, la democracia es prácticamente irrecuperable. Las únicas alternativas son la obediencia, la cárcel o el exilio. Y Venezuela está cada vez más cerca de esa dictadura. Esa es su tragedia.

En estos días se está hablando mucho de ''democracia''. Infortunadamente, se está identificando la democracia con elecciones libres. Obviamente, éstas son importantes. Ni en Cuba ni en Corea del Norte hay elecciones libres. Esto motiva un énfasis natural en su importancia. Pero las elecciones son sólo una parte del proceso democrático. En América Latina se están aprovechando para desmantelar el sistema democrático desde el poder.La democracia es el gobierno del pueblo, a través de sus representantes electos. Ahora bien, y esto es lo fundamental, el concepto de ''pueblo'' comprende tanto a la mayoría como a las minorías. Ese ''pueblo'' tan elogiado por los populistas incluye a todos. Y lo es, entre muchas otras razones, porque las minorías pueden convertirse en mayorías y las mayorías en minorías. ¿Acaso es algo extraño? ¿No ha sido así siempre?

Ahora bien, para que la mayoría pueda cambiar de opinión --y cambiar de opinión no es nada excepcional sino, muy por el contrario, es lo habitual, tanto en la política como en la vida-- las minorías tiene que tener, entre otras cosas, plena libertad de expresión y de organización. De aquí la importancia de que la oposición tenga sus propios medios de comunicación. Su liquidación es el inicio de la dictadura. Aunque no lo parezca, la democracia moderna es el producto extraordinariamente sofisticado de una larga experiencia histórica. Todo el sistema de balances y contrapesos (checks and balances) de la democracia está concebido precisamente para impedir que nadie tenga excesivo poder.

Estas reglas de juego básicas están contenidas en las constituciones de los países. Es por eso que el primer objetivo de las mayorías izquierdistas es precisamente cambiar la Constitución. De vez en cuando, leemos en los periódicos que la policía protege una manifestación del Ku Klux Klan o del Partido Comunista de EEUU. ¿Por qué protegerlos frente a la cólera de las mayorías? Muy sencillo. Porque, como parte del pueblo americano, tienen derechos inalienables. Es un delito interferir contra el ejercicio legal de los mismos.

¿Cuál va a ser el próximo capítulo en la lucha de Chávez por imponer su dictadura? ¿Cerrar Globovisión? No lo creo. La liquidación de RCTV le ha traído demasiados problemas. Lo más probable es que se concentre en aniquilar al movimiento estudiantil independiente. Lo pudiera hacer suprimiendo los requisitos de admisión con la excusa de la lucha contra el ''elitismo'' e inundando las universidades con jóvenes chavistas descalificados. Obviamente, estos no van a poder entrar en las universidades sin la aquiescencia de la dirección administrativa. No es ningún problema.

Cuando Chávez diga que suspender a un estudiante es prueba de elitismo, el 99 por ciento de los profesores va a aprobar a todo el mundo. En caso de cualquier resistencia, Chávez liquidaría la autonomía universitaria. Por su parte, los estudiantes que protesten van a ser acusados de estar defendiendo sus ''privilegios'' clasistas. Me temo que muchos van a tener que terminar sus estudios en el exterior.

Que nadie se engañe, todas esas civilizadas discusiones que los venezolanos han visto en los últimos días son la reacción apaciguadora de un gobierno momentáneamente asustado. Pero, de ahora en adelante, la gente se va a ir acostumbrando a una Venezuela sin RCTV. Dentro de poco, vendrá la liquidación de la autonomía universitaria. Y después no va a haber mucha oposición visible a la liquidación de Globovisión. ¿Quién va a protestar entonces por el cierre de las pocas estaciones de radio opositoras que queden? ¿Quién va a protestar, digamos, por el cierre de Golpe a Golpe, el excelente programa radial de Fausto Masó y Roberto Giusti? ¿Y qué van a significar entonces unas ''elecciones'' sin oposición y, por consiguiente, sin libertad de elegir? Hay que dar la batalla ahora, cuando todavía se puede. Mañana, la única alternativa va ser la cárcel o el exilio.